TIPOS DE NAVEGADORES
Un navegador web es un software, aplicación o programa que permite el acceso a la Web,
interpretando la información de distintos tipos de archivos y sitios web para que estos puedan ser vistos.
- Mozilla Firefox
- Opera
- Safari
- Internet Explorer
Mozilla Firefox
Para mucha gente es el navegador que le transmite más confianza, seguramente porque, aparte de ser uno de los más veteranos (salió en el año 2003) es sólido, estable
y presenta muy pocos errores.
Firefox, el segundo navegador más utilizado en Internet, se caracteriza por ser un programa independiente, y para muchos es su favorito porque no tiene ánimo de lucro.
Ha sido desarrollado a lo largo de los años por decenas de programadores que lo van mejorando en cada actualización.
Además, es un navegador altamente personalizable, ya que cuenta con un amplio abanico de temas y complementos.
Pero lo mejor de todo son las extensiones, pequeñas adiciones gratuitas elaboradas por cientos de desarrolladores alrededor del mundo que cumplen todas
las labores y funciones imaginables.
Opera
Es el navegador web alternativo por excelencia. Es también uno de los más veteranos y, durante muchos años, ha sido de los más utilizados en los
teléfonos móviles, hasta la popularización de los smartphones. Está desarrollado por una compañía noruega y, al igual que Firefox, no tiene ánimo de lucro.
Su última versión, el Opera 15, usa el mismo motor que Google Chrome, por lo que se pueden utilizar en él las mismas
extensionse disponibles para el navegador de Google. Además, incorpora una novedad muy interesante, lo que ellos llaman el “Estante“,
una reinvención de los marcadores o favoritos que permite ir guardando páginas que interesan para leerlas posteriormente.
Opera es también altamente personalizable; contiene una amplia variedad de temas y su velocidad no tiene nada que envidiar
a los más populares Chrome o Firefox.
Safari
Safari sigue siendo un navegador web asociado a los Macs de Apple, a pesar de que en 2008 saltase también a la plataforma de Microsoft, con sus sistemas Windows.
A pesar de que es el cuarto navegador más utilizado de Internet, manteniendo una cuota de mercado que está entre el 5 y el 8%, su crecimiento es muy lento, sobre todo por
el hecho de que su versión para PCs no tiene nada de destacable en prácticamente ningún aspecto. Además, hace más de un año que no la actualizan, con las brechas de seguridad que esto puede ocasionar.
La versión de Safari para Apple es otra cosa; ofrece un buen rendimiento y es el preferido por sus usuarios, ya que se beneficia de que su sistema
operativo está desarrollado internamente por la misma compañía.
Además, Safari cuenta con algunas opciones interesantes; una de las más relevantes es su modo “Lector“, a través de la cual se difumina parte de la pantalla y el texto
central pasa a mostrarse destacado en negro sobre blanco, lo cual resulta ideal para la lectura de publicaciones online.
Safari no es el navegador más rápido de todos los que existen, pero es estable y eficiente, con un aspecto muy sencillo destinado a
un tipo de usuario con conocimientos informáticos básicos. Eso sí, en cuanto a oferta de funcionalidades y extensiones, se ve superado por su competencia.
Internet Explorer
Explorer mantiene su amplia cuota de mercado (alrededor del 60-65%) gracias a que fue el primero en salir y también que viene predeterminado en todos los
PCs de Microsoft, pero no está actualmente a la altura de los otros grandes, básicamente por la gran cantidad de fallos que arrastra.
Los distintos desarrolladores de Internet Explorer no han sabido estar a la altura de la competencia; no obstante,
parece ser que Microsoft actualmente está poniéndose las pilas de nuevo para volver a considerar a Explorer una prioridad en su estrategia de actuación.
Hoy por hoy, Internet Explorer no se caracteriza por su especial velocidad y es el navegador que presenta más problemas de seguridad de todos los candidatos.
Las restricciones innecesarias que pone Windows a sus actualizaciones en sistemas operativos viejos tampoco son un aliciente para optar por esta opción.